La Dra. Laura Martínez, psicóloga canina y líder del estudio, destacó la importancia de este hallazgo para el bienestar de los perros y su relación con los humanos. “Nuestros resultados sugieren que el juego interactivo no solo es una fuente de entretenimiento para los perros, sino que también puede ser una herramienta valiosa para fomentar una mayor empatía y comprensión entre los perros y sus dueños”, explicó la Dra. Martínez.
Los dueños de perros están entusiasmados con los hallazgos del estudio, y muchos han expresado su deseo de incorporar más juegos interactivos en la rutina diaria de sus mascotas. La industria de los juguetes y accesorios para perros también está respondiendo a esta tendencia, presentando una gama de nuevos productos diseñados específicamente para estimular la inteligencia emocional de los caninos.
En última instancia, este estudio promete cambiar la forma en que vemos la interacción con nuestros perros. Más allá de ser simples compañeros peludos, los perros pueden ser animales emocionalmente inteligentes capaces de interpretar y responder a nuestras señales emocionales de manera más profunda. Con la inclusión de juegos interactivos en la vida cotidiana de los perros, no solo estamos enriqueciendo su experiencia, sino también fortaleciendo el vínculo especial que compartimos con ellos.